LA REALIDAD DE LO INVISIBLE
"Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve"
Hebreos 11:1
Si comenzamos analizando este versículo, nos damos cuenta que la Fe, es esperar algo que vamos a recibir (realidad) y aunque no lo vemos (invisible) estamos convencido que así será. En otras palabras, lo invisible se hace parte de la realidad.
Para comprender esto, vamos a hacer el siguiente ejercicio:
Cual es el número que se necesita para que una mano sea una mano? Bueno, me imagino que pensaste en el número 5, y claro, es lo que se ve. Pero no es así. Para que una mano sea una mano se necesita el numero 9. Se lo voy a demostrar: usted tiene 5 dedos y tiene 1 espacio entre cada dedo. si sumamos 5 dedos + 4 espacios = 9. Se dio cuenta! Sin esos espacios usted no tendría una mano, tendría una palma, fuera palmípedo como un pato y no podría darle el uso adecuado para el cual esta diseñada.
Esos espacios invisibles son los que hacen posible que su mano se mueva y sea útil para agarrar, señalar, etc. Así también pasa con el ser humano, esta compuesto por algo real, su Cuerpo y 2 cosas invisibles: su espíritu y su alma. El orden divino establecido es que su espíritu domine al alma y esta domine al cuerpo. En el espíritu, esta la conciencia para discernir entre lo bueno y lo malo, esta la intuición con la que usted puede conocer los movimientos del Espíritu Santo y esta la Comunión con la que usted adora a Dios. En el alma están las emociones que determinan sus sentimientos, afectos y deseos y esta la mente que es donde están sus pensamientos. Por medio de la mente usted conoce, imagina, recuerda y entiende. Por consiguiente, su cuerpo solo sirve para albergar al espíritu y al alma.
Toda la obra de Dios comienza en el Espíritu (invisible) y debe seguir al alma (invisible) para luego expresarse en el cuerpo (real). Debemos primero escuchar la voz de Dios que se comunica a través del Espíritu Santo para que sepamos cual es su voluntad y podamos discernir entre lo bueno y lo malo. Luego dejamos que el Espíritu Santo tome nuestra alma y controle nuestros pensamientos , afectos, emociones estableciendo el domino propio para hacer las cosas que a Dios le agrada. Lo último que debemos hacer para que la obra de Dios se complete perfecta, es que todo esto alcance nuestro cuerpo.Dice la Biblia que Dios tuvo manifestarse en carne para que la gente crea (real) y sea salvada (invisible).
Cuando solo nos manejamos de acuerdo a lo que ven nuestros ojos (Real) nos volvemos seres superficiales, donde lo único que cuenta es lo material, lo tangible y solo satisfacemos los deseos del cuerpo. Su cuerpo como dijimos antes, solo tiene que ser un siervo y estar sometido al alma y el espíritu. Recuerde también, que su cuerpo es templo de Dios y debe cuidarlo y mantenerlo sano para presentarlo en sacrificio vivo, santo y agradable a Dios.
"no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas" 2da corintio 4:18
Que ese mismo Dios al que usted y yo le creemos nos bendiga y nos guarde.
Amen!
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