La importancia de la sensibilidad en la comunicación
Cuidado con tu sensibilidad, si no la manejas adecuadamente puede tener implicaciones negativas. Sucede muchas veces que, escuchar a una persona expresarse en un lenguaje fluido, pausado con un tono adecuado, sin emociones alteradas, nos puede causar buena impresión, sin embargo sus palabras pueden ser dardos envenenados. Por otro lado, escuchar a una persona emocionalmente alterada, con un tono fuerte, puede causar rechazo, sin embargo, sus palabras son sinceras y enmarcadas en la verdad. En un momento, Jesús profirió palabras muy fuertes (Juan 6) y cuando sus apóstoles le llamaron la atención porque muchos discípulos se estaba yendo del ministerio por el lenguaje desafiante en que hablaba, sus palabras fueron: "Mis palabras son espíritu y vida, pero si ustedes también las encuentran duras, hagan lo mismo y váyanse". Al final muchos se fueron, pero el ministerio permaneció. Tener una escucha activa es prestar atención no solo al tono y la apariencia, sino también al conten...