“Suerte” o actitud para hacer ciertas cosas de ciertas maneras

Me imagino que alguna vez te has preguntado: ¿Por qué hay personas que parece que siempre están bien, que todo le sale como planean, que sus proyectos prosperan, que todo el mundo las buscan para compartir y que parecen que nunca le da gripe?

Decir que es “suerte” sería un mito. El asunto es que hay personas que hacen ciertas cosas de ciertas maneras y se mueven de cierta forma dando la impresión de que todo esta bien. Son personas de carácter, fabulosas, creativas, innovadoras, que portan unas cualidades que las hacen sobresalir y diferenciase de la gran mayoría.

Estas personas a la que parece que la “suerte” siempre le acompaña, lo que han hecho es  aprender a manejar ciertos hábitos que les permiten conectarse con cualquier persona en cualquier entorno y sin importar que estén bajo situaciones totalmente adversas consiguen su objetivo.

Aprender a desarrollar estos hábitos puede ser una locura, ya que se necesita de mucha preparación, mucha práctica y constancia para poder incubarlo en nuestra mente y poder influir en  las personas.

A continuación, te mostraré solo algunos de esos hábitos que pueden resultar imprescindibles para lograr el propósito y hacer nuestros días más fáciles.  

Sonríen y se alimentan bien.
Una de las características más sobresalientes de las personas que parecen tener “suerte” es que tienen una sonrisa para todo y para todos, y muchas veces hasta para dar un boche te reciben con una sonrisa para desinflarte. Sonríen porque han entendido el poder de la sonrisa y como esta se convierte en un bálsamo para quienes la reciben. La sonrisa genera un ambiente agradable y crea una atmosfera tan positiva que neutraliza las malas noticias.

¿Quién se resiste a la sonrisa de una persona influyente? Estas personas son encantadoras y hasta en fotos irradian entusiasmo. Casi como en una ecuación en la que 2+2=4 así mismo sucede con este tipo de personas en la que su sonrisa va acompañada de un estomago bien atendido. La sonrisa cuida su imagen, la comida su físico.

Para ellos, alimentarse bien no es una opción, es un hábito. Ellos saben lo que implica estar enfermo y no se dan el lujo de maltratar su cuerpo. Distribuyen su tiempo de manera que puedan alimentarse y renovar energías para enfrentar los retos que se presentan día a día.
Su encantadora sonrisa no es para allantar, es un hábito de ganadores.

Toman las cosas en serio.
Su sonrisa no es chabacanería, no te confundas. Tomar las cosas en serio no significa que hay que tener la cara dura y odiosa. Su sonrisa va acompañada de una expresión de madurez. Ellos se comprometen y se involucran en todo lo que hacen y en lo que los demás demanden de ellos. Son responsables y respetuosos de los tiempos y de los recursos que tiene a su disposición.

Son gente que no procastinan. Lo que comienzan lo terminan, al menos que tengan la certeza que de seguir puede traer resultados no deseados. Analizan, investigan y buscan las mejores soluciones para que todos los involucrados salgan ganando, por eso son ganadores. Tienen un gran carácter. Son personas definidas, constantes, con un gran sentido de congruencia, lo que dicen es lo que hacen, Si prometen, cumplen!    

Ven detalles que la mayoría no ve.
Son extremadamente observadores. Como se toman las cosas en serio, están pendiente de todos los detalles. Están consciente que hasta lo más sencillo puede ser relevante. Utilizan convenientemente todos los sentidos. Una característica es que son gente sorprendente. Son lo que encuentran la aguja en el pajar.

Siempre hay alguien que le dice: Wow! “no había pensado en eso”, “nunca lo hubiera notado”. Son cuidadosos con la redacción, con las palabras que utilizan y de las informaciones de que manera textual o visual le presentan. Quienes son sus colaboradores lo saben y revisan minuciosamente antes de enviarle cualquier información. Sus entornos son limpios y ordenados.

No sienten vergüenza de preguntar.
Su gran poder de observación no lo hacen unos superdotados. Ellos saben que no lo saben todo. Tienen mucha información pero la filtran. Preguntan y vuelven a preguntar si no entienden algo y no sienten vergüenza. A través de las preguntas ellos pueden obtener informaciones valiosas, detalladas y descriptivas sobre una situación en particular. Preguntan para profundizar en los sentimientos, deseos y  percepciones de la gente y saber cómo llevar  un contacto a una relación duradera.

Aprenden de los  demás.
Son personas abiertas y aceptan con toda humildad que siempre hay algo nuevo que descubrir para aplicarlo en la vida. Cuando comenten errores los reconocen como una oportunidad de mejora. Saben que el crecimiento es progresivo y no limitan el aprendizaje encontrando siempre la manera de expandir lo que han aprendido.

Son expertos en el arte de conversar sacando provecho de cada tema pues por experiencia saben que siempre aparece algo relevante que lo puede ayudar para sus propósitos. Prestan atención a las personas cuando están buscando soluciones a conflictos o adversidades y nunca le dicen “sé cómo te sientes” si realmente no han pasado una situación similar.

Tienen límites y no temen de decir “NO”.
Son gente con  poder  de dominio propio. Saben hasta donde estirarse sin  romperse. Conocen sus limitaciones y debilidades pero también aplican magistralmente sus fortalezas y aprovechan cada oportunidad. Conocen su lugar, su rol y han establecidos su fronteras emocionales.

Son asertivos. Aplican la regla de oro “no le hacen a nadie lo que ellos no quieren que les hagan”. Son personas seguras de quienes son y no tienen temor de decir “no” cuando entienden que no es el momento oportuno. A pesar de su sonrisa y don de gente, no son de los que siempre dicen “sí”. Si no está de acuerdo con alguien, expresa su disconformidad. Han aprendido que todo el mundo respeta a quienes dicen lo que piensan y no tienen temor de buscar la verdad.

Dan seguimiento.
Una de las cualidades más sobresalientes es el seguimiento que dan a las personas, proyectos, noticias, novedades, avances tecnológicos, política, deportes.  Siempre están al día con l en el mundo que sucede. Se interesan y se preocupan por la salud física, espiritual, emocional y económica colaborando y contribuyendo en lo necesario.

Cuando habla con alguien presta atención y trata de recordar detalles relevantes de sus historias, las personas importantes en su vida, sus pasatiempos, sus gustos, deseos, sus lugares favoritos, sus preocupaciones, de esa manera podrán iniciar una nueva conversación cuando se vuelvan a ver y dejar una sensación de conexión emocional. 

Manejan el tiempo rigurosamente para cumplir con las metas que se ha propuesto. No generan stress, más bien, logran armonizar perfectamente haciendo referencia puntual sobre las cosas pendientes siendo flexibles cuando encuentra dificultades para obtener los resultados esperados. 

Mantienen contacto con las personas que consideran importantes para su vida. Utiliza todos los medios posibles para conectarse con ellas y saber su situación actual. Revisan los correos, interactúan en las redes sociales y disfrutan compartir con la gente. Desarrollar estos hábitos puede hacer tus días más felices.

Si llegaste hasta aquí, gracias, es el final. 

Comentarios

Entradas populares de este blog

EN EL DESIERTO NO HAY ATAJOS

BIO: JOHAN PAULINO

CANDIDO BRITO (MORENAJE)